el salvavidas

Y a pesar de que todo sigue hecho bolas aquí, tú aún me sigues esperando al otro lado de mi memoria. Porque aunque me encuentre yo enbolada, de lo único que aún estoy segura, es de ti.

Caen uno a uno los pétalos dejando estelas de un triste aroma a rosa marchita.
Porque para preservar tu escencia, necesito tus besos, tus brazos y el hueco tímido entre mis piernas.
A veces se siente una angustia por cosas pequeñas, muy aveces.
Pero esas pocas veces y esas pequeñeces, te tumban como ninguna otra.
Aún así, siempre existe ese rayito de sol que sube y baja a diario para calentar mis adentros.
Por ahora trataré de pensar y sentir todo eso bello que me alegra los minutos,
mientras cubro mis manos del frio y disfruto un delicioso café negro, en ese cómodo lugar donde se puede ver y oir a los pajaros cantar.

Cuando termino de llorar se aparece ante mis ojos tu figura,
tu sonrisa y tu piel morena.
Todo ese conjunto mágico que adoro y que aún no se,
si algún día tendré.

Eres tú, soy yo y mientras no somos nada

Dice mamá que algún día creceré y todo será distinto, que triunfaré.

Yo le digo a mamá que entonces creo tener noventa años porque hasta donde voy, yo ya triunfé.

A veces mamá no entiende las cosas o será que yo no las se explicar, hay veces que con mamá quiero platicar y otras tantas que ni siquiera le puedo hablar.

A fin de cuentas todo da vueltas y se viene a acomodar.

En esta noche tranquila y fría el buen amigo desahogo me vino a abrazar.

Y así fue, como dormí y aprendí.

Por lo pronto y mientras dure dormiré.

Hay pecados que dejan marcado el corazón

Por favor deja/me/te/nos/lo fluir. Algún día la vida nos/te/lo/me premiará

Quisiera entender que pasa cuando digo no quiero

Es difícil gritar y que nadie te escuche, es difícil llorar por dentro y ahogarte mientras muestras una sonrisa. Pero es necesario a veces dejarte correr como río en la soledad de cuatro paredes. Hay tanto que tienes que decir y tan pocas personas o nadie que pueda entenderte; nadie a quien puedas contarlo. En ocasiones es necesidad llorar hasta secarse los ojos y el cuerpo, para descansar el alma. Es necesario tener un papel a la mano y vomitar la mayoría de letras que se puedan para tratar de aliviar/me/nos el corazón.

ahh! !

Llegar y decirte adiós duele como mi pecho desnudo sobre la nieve

… pero

Saberte feliz y renovado me alegra tanto que mucho es poco

(PD: y vaya que mi complexión es amplia y mi pecho más pero esta serenidad que siento supera mis dimensiones carnales =))

Cada vez que oscurece, la locura me abraza la memoria; me cuenta donde estás, cómo te ha ido, me susurra acerca de los lugares que frecuentas y me incita a extrañarte, a saber que ya no eres más, parte de mi.

Cada día me propongo a borrarte una letra, a quitarle centímetros de sentimiento a tus imborrables caricias, a pensarte cada vez menos. Y se que podré.

Rezaré aunque me sangre la boca, y pediré por ti, pediré por nosotros, pediré por mí. Pediré por todo este tiempo que viajamos tan separados sabiéndonos siempre ahí.

Saldré y me pondré mil moños para disfrazar de rojo amor mi melancolía. Después, gritaré, lloraré, reiré, caminaré por lugares aún no explorados, seré feliz. Seré grande, compraré otra planta, aprenderé a cantar, tomaré más agua, hablaré tanto que se me secará la lengua, aprenderé mil cosas, disfrutaré muchas otras; disfrutar/me/te/nos/

Bailar, bailar al compás de mis ganas para sacar todo aquello que me abruma, al ritmo de una lenta y penetrante canción.

Me/te sabes

Como no vencerme ante tus ojos y ante ti,
Si el tiempo no ha hecho su trabajo en mí y me ataca con recuerdos,
Cuando falta amor están los deseos, y si no,
Aún queda la prueba del recuerdo.

Para irme de ti no hace falta salir corriendo.
Ni cerrarte la puerta, ni taparme los ojos.

A veces la tarde y sus colores azules
me dicen al oido palabras que reconfortan mi espíritu.

No me bastó uno buen despertar a tu lado,
ni los mil kilómetros que recorrimos juntos,
ni la planta que puse en mi recibidor,
no me bastaron las sonrisas que me regalaste.

No nos bastamos y heme aquí escribiendote una ilusión.

Para irme de mi no hace falta huirle a la vida,
ni llorarme entera. Solo cierro los ojos pienso en ti;
y nos vamos olvidando los dos...

...como se olvida, se fuga y se pierde una tímida gota en medio de la lluvia.

Para tí, Almibaradas caricias para esta noche fria.

Tengo unos ojitos muy traviesos que te fotografian sin sesar. Para que no me falten ni tu boca, ni tu cuerpo, ni tu forma de mirar

Venga pa´delante!! a vivir se ha dicho =)